4 de octubre de 2014

Capítulo 20 - Pseudoeditoriales

Hace unos días, mientras revisaba mi perfil en Twitter, encontré una mención que no me esperaba para nada. Era una pequeña editorial que se había puesto en contacto conmigo ofertándome publicar mi posible libro sin exigirme mínimos de venta ni cobros por adelantado, adjuntando una dirección de correo electrónico.

La curiosidad mató al Skitty, como suelo decir, así que consulté tanto su página web como su perfil de Twitter. ¿Y qué fue lo que encontré? En su web pone claramente que solo están dispuestos a publicar autores residentes en España, mientras que en su cuenta en la citada red social prácticamente todos los tuits eran iguales, cambiando el destinatario.

Entiendo que esta sea la época del año en la que los escritores que tienen manuscritos preparados los van enviando a diversas editoriales para, con suerte, ser publicados en el siguiente año. Comprendo que esta sea el momento idóneo para publicitarse. Pero, en este caso, lo cierto es que no lo están haciendo nada bien. Para empezar porque lo hacen de una manera un tanto aleatoria, pues si se hubieran informado un poco sobre mí antes de mandarme aquel tuit habrían averiguado fácilmente que vivo en Francia, por lo que directamente no estarían dispuestos a ofrecerme sus servicios. Además, destacan de una manera bastante visible el hecho de que no cobran o exigen mínimos de venta, eso sin mencionar que piden el manuscrito completo y prometen dar una valoración en el plazo de un mes como máximo.

Aunque hubiera tenido listo algo para publicar, ¿pensáis que se lo habría confiado? Evidentemente, no.

Si algo he aprendido a fuerza de escucharlo muchísimas veces es que para publicar tu libro no debes pagar. Y, en caso de que te hagan pagar, prepárate para ser blanco de todo tipo de artimañas rastreras, pues ellos ya han cobrado y hecho negocio con tu obra y tus ilusiones. Una editorial de las de verdad no te cobrará, ni a ti ni a tus amigos y conocidos. Y, si lo hace, es coedición consentida o encubierta. Si os intentan exigir dinero en algún momento, lo más sensato que podéis hacer es huir.

El mundo editorial es difícil, lo sé. Y ahora lo es mucho más, pero eso no es óbice para que florezcan editoriales que, en lugar de ofrecerle sueños al mundo, se los roben con sus malas artes.

2 comentarios:

  1. Hola. Sí que hay que tener cuidado con este tipo de cosas. A mí me pasó que envié un manuscrito a una editorial hace ya algún tiempo y en el e-mail de respuesta me comentaron que les interesaba una co-edición y que yo tendría que adelantar 2.000 euros (así tal cual, sin rodeos, ¿para qué? XD). Y pensé: primero, el manuscrito no lo he enviado entero, solo una muestra, así que no habéis podido leer toda la historia. Segundo: Por favor, un poquito más de sutilidad a la hora de pedir dinero... En fin, que al final no acepté, claro. No voy a dar el nombre de la editorial porque creo que no es correcto, pero... sí que te comento esta "anécdota" (por llamarlo de alguna forma ;P)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero mucho. Yo cuando vi que se publicitaban con un tuit copypaste y que encima no se habían molestado en informarse sobre mi persona se me quitaron todas las ganas de volver a saber de ellos. Yo tampoco he dado el nombre de la editorial de mi caso, pero es que si fuera ellos sentiría vergüenza ajena por esto. Espero que a la siguiente oportunidad no tengas que ver como te exigen dinero.

      Eliminar

¡Muchas gracias por tu comentario! No te preocupes si tarda un poco en aparecer, pues la moderación está activada ;)

Safe Creative

Safe Creative #1407230131143